martes, 31 de julio de 2012


Hay días que vas por la calle
Sientes que el sol esta frío.
Y en pleno verano, al final
Ves que es cosa de uno mismo.
No encuentro respuesta a la carta
Que guardaste en mi bolsillo
Si sabes que ir sobre ascuas.
A veces no es nada sencillo.
En vela a contra corriente
Naufragué una noche de agosto
Y perdí cada recuerdo
Que dio cuerda a tu rostro.
Mi vida no quiero perdones
Ni lutos en la tormenta
Quiero que no me abandones
Cuando me manden ir a la guerra.

martes, 17 de julio de 2012


Lo llevamos clavado como una honda de frio.
En medio, este infierno de retratos sin rostro.
Y hoy no me apetece nada, solo en esta casa de madera
Que habla en la pared palabras de demonios,
Que corren por la llanura del lobo y el conejo negro.
Las velas se encienden, y a la orilla del mar
Se vuelve la sangre adentro ocultando lugares azules.
No quiero ser el que guarda una bola de fieltro en la garganta
Y se detiene en busca del naufrago perdido.
La corriente alterna y da salida a dos lugares distintos
En uno estás tú guardando la llave de toda una vida junto a las flores.
En otra está la bajada a los infiernos y universos de cemento y televisores.
Solamente crece algo en medio de este fango rojizo
Un árbol floreciente de verano, con las ramas y colores de almendros
Que cura la tierra seca, y el vapor de gases nauseabundos.
Y allí camino lentamente al jardín de los paraísos perdidos,
Sin saber la ruta ni la dirección. Como el que ve un sueño sin sentido.

jueves, 12 de julio de 2012


Preciso encontrar la caída
Antes de volver atrás.
Y recuperarse del pasado,
Nunca fue tarea del llanto.

Y a veces nos sentimos tan culpables
Siendo jugadores de segunda división.
Solamente unos acordes,
Una melodía, un verso, una canción.

Y la madrugada y sus raíces.
Espero impaciente tu llamada
Y me entra el bajón,  pensando
Que quizás no quieras verme.

Y vuelvo a coger la guitarra
Abriendo paso a la fuerza,
Declarando guerras, miserias,
Y algún triunfo de vez en cuando.


Se cierra la herida y sale una canción
Algunas curan y otras desnudan.
Y pensar que hay límites cerrando puertas
Nos da fuerzas para abrirnos la cabeza.